Día de estudios y examenes

Hoy me he prometido repasarme bien el examen. Por eso he puesto el despertador a las 8, cuando ha sonado hacía frío, por lo que le he dado a la opción de 5 minutos más, aunque en realidad son 8. Vale, 8 minutos más tarde no iba a hacer más calor, pero no me pidáis más recién levantada.
Bueno, antes quiero aclarar que yo creía haberle dado a 5 minutos más, lo que he hecho ha sido apagarlo. Por eso a las 9 y bastante pensaba que jo, que 8 minutos más reconfortantes, hasta que he mirado el reloj.
Mierda.
Luego me he puesto a estudiar. Siempre uso rotuladores lavables porque tengo la costumbre de pintarme si la asignatura es aburrida, y esta lo es. Mucho. Vale, seamos sinceros, mortalmente aburrida. Una vez llegue a pintarme de los dedos de los pies al muslo unas flores monisimas, suerte que era el lavable para niños. Hoy, después de una mano pintada, me he acordado de que este no. Aún tengo una mano levemente azulada.
Mierda.
Luego me he ido a la biblioteca y he pillado una taquilla, pero estaba rota, la única funcional estaba justo debajo de una que estaba vaciando una chica. Primero revisaba un libro y lo acomodaba, sin prisas. Luego otro, con más calma, no fuese que con el anterior hubiese actuado de manera precipitada. Y yo mientras mirándola mientras que intentaba meter el candado en su sitio, a ver si se arreglaba magicamente. Ella sacaba una botellita de agua, todavía en la taquilla, y se puso a beber a sorbitos, no fuese que se atragantase; yo seguía mirando pensado en si me podrían hacer algo por meterle la botella de un golpe, cuando se volvió y me dijo "parece que esa taquilla está rota, vas a tener que probar en otra". Eso espero, so hija de hiena, a que te quites.
Luego me he sentado en un sitio tranquilo. Otro chico ha venido y se ha sentado en frente, con aire bohemio, elegante y mono, ya estaba pensando mi mente de casamentera cuando ha empezado a hacer algo, "ras ras ras" era el ruido que hacía su mano contra su bragueta, que el colega tenía unos picores que riete tu de Cristiano Ronaldo. Joder, se ha cargado todo su encanto en un plis plas. Luego han llegado dos amigos suyos más, cuyo pasatiempo entre folio y folio era mirarme, cosa que me pone sumamente nerviosa. Jo, que hasta he ido derecha al salir a mirarme al espejo a ver si tenía algo raro. Encima a los señores que mandan, que siempre me los imagino como siluetas negras enormes, se les ha ocurrido que el mejor momento de hacer obras en la biblioteca es en febrero.
El examen me lo he inventado, pero por lo que he visto ha sido la tónica general.
Escribir un post viene a ser como hacerse un ovillo y llorar